jueves, 16 de febrero de 2012

Resiliencia






Es la capacidad de afrontar, sobreponerse a las adversidades y resurgir fortalecido o transformado.


Metafóricamente, el proceso resiliente es parecido a la creación de una perla dentro de una ostra. Cuando un granito de arena entra en su interior y le agrede, la ostra segrega nácar para defenderse y, como resultado, crea una joya brillante y preciosa.
Este término está relacionado con ver el vaso medio lleno.

Problemas que desencadenará en una persona no resiliente:
-Sentimiento de falta de control en su vida
-Dificultad en manejar el estrés
-Falta de empatía hacia otras personas
-Dificultad en la comunicaión afectiva y capacidades interpersonales
-Ausencia de habilidades en resolución de problemas y tomar decisiones
-Incapacidad en establecer metas realistas
-No ser capaz de aprender tanto del éxito como del fracaso



El Arte de la Serendipidad

Es la sabiduría de convertir en buena suerte un acontecimiento inesperado o adverso, un accidente o un contratiempo. 
Es el arte de saber buscar los beneficios escondidos en las dificultades, es una manera resiliente de convivir con la incertidumbre y, por tanto, de construir o dar forma al futuro.
Se trata de ser capaz de encontrar la respuesta a esta pregunta: ¿Qué hay de bueno en todo esto?
                                         






Cualquier adversidad puede posibilitar el resurgimiento de la persona herida si ella misma y el entorno saben crear las condiciones necesarias para lo inesperado, es decir, que la buena suerte juegue de nuestro lado.